jueves, 13 de septiembre de 2012

IT'S TIME TO CHANGE

Jo,quería continuar la serie de Skins y ver otras tropecientas series más,pero como han empezado ya las clases de la uni ya no puedo verlo...Sólo los fines de semana y ni eso DDD:

Tengo que hacerme una foto carnet para la ficha de los profesores y aún no sé cómo salir...
En fin...Os habéis dado cuenta de que ha habido un gran cambio en mi blog?Pues eso...
*estoy cansada de ese "nohagonada"

lunes, 6 de agosto de 2012

Te voy a esperar.

191/365

Y mientras lo hago, voy a volver a ser yo misma.
Quedaré con mis amigos y saldré de fiesta, disfrutando la libertad de un baile alocado y lento.
Estaré con mi familia y la mantendré unida y feliz aportando conversaciones absurdas y graciosas para sonsacarles una fina sonrisa en su rostro. Puede que hasta una carcajada. Les abrazaré tan fuerte que les impediré respirar por un breve periodo de tiempo, que como suelen decir: «La vida no se mide por los momentos que respiras sino por los momentos que te dejan sin aliento.»
Cantaré y bailaré bajo la ducha. Si llueve, pienso hacer lo mismo pero pisando el césped y sintiendo la brisa del momento. Jugaré con globos y cometas sin que nadie me quite la ilusión.
Conoceré nuevas amistades que me ayuden a crecer como persona. Que me ayuden a abrirme a nuevos horizontes.
Aprenderé de todos mis errores y sonreiré cuando menos ganas tenga porque de esa manera, podré recuperarme.
Todo lo que tenga que estudiar, me lo aprenderé de muy buena gana porque quiero conocer, saber el mundo. ¡Comerme el mundo!
Porque te quiero.

jueves, 2 de agosto de 2012

Yo y... yo misma.

Esta entrada no va a ser de ningún texto ni nada de eso. Va a ser una entrada para explicaros la nueva dinámica que quiero llevar. Suelo usar este blog como terapia de desahogo. Escribir hace que me siente muy bien conmigo misma. Por lo cual, voy a usarlo como mi pequeño diario personal. Desde luego que subiré mis textos porque... ¡porque necesito compartirlo!
Sinceramente, no sé quien está leyendo esto ni sé si le importa mucho a alguien; pero me da igual.

Desde hace un tiempo (bastante tiempo, la verdad, como 4 años), me gusta un chico un año más mayor que yo. Ya creo que lo mío no es enamoramiento, es una enfermedad. ¿Se puede querer tanto a alguien? ¿Se puede pensar en alguien durante tanto tiempo? Es cierto que este año ya no pienso cada día en él como lo hacía antes, ni hablo de él tanto, ni le busco en ninguna de sus redes sociales. Seguro que estarás pensando ''¿A qué viene tanto drama?''. Viene a que tiene novia. ¿Sabes cuanto llevan juntos? 4 años. Los consejos que me dan es que me olvide de él, y de verdad, de verdad, incluso lo puedo jurar por mi vida, que me estoy olvidando de él pero siempre se tienen momentos de decaída. Como viene siendo hoy. He pasado por el instituto esta mañana y me ha venido muy buenos recuerdos. Tan buenos que me han hecho sonreir en mitad de la calle. Cualquiera que me hubiera visto pensaría que estoy loca.

En fin... Esa ha sido una pequeña anécdota que me ha pasado hoy y un poco la introducción del por qué de dicha anécdota.
Eso es todo lo que quería escribir por hoy. Sé que es muy tarde, pero siempre me gusta hacerlo casi acabando el día porque nunca pasan cosas a las 23:59 de la noche. Pienso que a partir de las 21:00 ya no ocurren más cosas.

miércoles, 1 de agosto de 2012

Borrón y vida nueva.

Querido Jake:
Leí tu carta. Dudé bastante en hacerlo. Creo que tardé como cuatro años o así en decidirme. Bueno, en decidirme no, en olvidarme de ti. Sí, así es. Todo ocurrió tan despacio... Pensé que nunca recuperaría toda aquella vida que viví a tu lado. Toda MI vida. Sonaré brusca y exagerada, pero es lo que sentí y lo que siento ahora que vuelvo a pensar en ti. ¿Que cómo me ha dado por contestarte ahora? Tal vez sea la idea de que por fin he conocido a alguien que no me miente; alguien que está siempre a mi lado. La idea de que soy mucho más feliz ahora que cuando estuvimos juntos. Es... como una doble felicidad: la que pasé contigo se transformó en dolor, sí; pero con Matt fue recuperar todo lo que perdí.
Esto que te escribo puede que lo estés leyendo o puede que no. Puede que sonrías por mi felicidad o puede que te destroce por dentro. Puede que hayas rehecho tu vida, como yo hice con la mía (y satisfactoriamente), o puede que te arrepientas de todo lo que has perdido, de todo lo que has hecho. Quiero que sepas que me da igual. Ya nada me importa. Ya NO ME IMPORTAS. 
Estas líneas están escritas con el más mínimo detalle y el mínimo rencor. Te perdono, pero no significa que te haya olvidado. Fuiste y serás mi primer amor, pero jamás serás el amor de mi vida, no después de lo que me hiciste.
Te deseo lo mejor de ti. El resto... 
Lauren.

Dejó el bolígrafo encima de la mesa. Todos los momentos que vivió con Jake pasaron en imágenes mientras escribía la carta. Tras humedecer la solapa del sobre lo cerró, escribió su dirección y la suya... la dejó en blanco. Lauren sonrió satisfecha. Logró sellar su pasado que resultó ser su primer amor. Observó tras la ventana como las olas del mar escondían y mostraban continuamente la costa, pacíficamente. Cogió sus gafas de sol y salió descalza a la terraza. Nunca pensó que recuperaría su vida y, lo más importante para ella, su felicidad. Pensó que nadie más la querría, hasta que Matt apareció en su vida.
Sonrió y dirigió su vista hacia el horizonte. Hoy se dibujaba perfectamente: mar azul verdoso oscuro y cielo completamente azul. Su vida ha comenzado de nuevo.

martes, 31 de julio de 2012

Diario de Lauren: La fiesta.

Lunes, 16 de noviembre de 2009.


Y allí estaba yo. En una de las muchas fiestas que harían en éste curso. No serviría de nada que fuera la que más participara en todas estas las actividades lúdicas, artísticas, escolares; seguiría sintiéndome sola. 
Por si fuera poco, el DJ empezó a introducir un CD en el reproductor de música. Deseaba con toda mi alma que no fuera una lenta. Una y otra vez me lo decía a mí misma, cerrando mis ojos y cruzando mis dedos: "¡Por favor que no sea lenta!, ¡por favor que no sea lenta!". Nada más oir las primeras notas todos mis pensamientos se disiparon, formando una horrible cara de tristeza que esperaba que no la viera nadie. Yo tampoco me la veía, pero estaba segura de que me preguntarían sobre ella de lo desganada que me sentía. 
Sentada en el banco, viendo como los chicos de mi clase sacaban a sus acompañantes a la pista, y muy raramente ví a un par de chicas como sacaban a sus parejas a bailar. Pude ver, como si de otra isla solitaria se tratase, rodeadas ambas del inmenso mar que forman las parejas bailando, a mi peor pero indudable amiga Ashley. En esos momentos, por mi cuerpo me recorrió un escalofrío y una mala sensación de soledad. ¡No quería sentirme como ella!, pero poco podía hacer. Sentí rabia, pero bajé la cabeza con culpabilidad. De repente, vi una sombra negra parada frente a mi. Era Jake, el ser humano más pesado que jamás había conocido. Alcé la vista hacía él, mis puños sostenían mi barbilla.
- Eh..., ¿quieres bailar?
Me lo dijo como si tuviera miedo de lo que podría contestar y era cuidadoso con las palabras. Y fue precavido, porque no tenía ni pizca de ganas de estar con él. Con nadie más bien.
- ¡Es que no puedes dejarme en paz! -grité-.
Me levanté y sin girarme, fui a sentarme a otro lado; pero volví a alzar la vista hacía aquella isla que aún seguía sola. Lo poco que me gustaba estar allí y la rabia que tenía se transformaron en sentimientos de victoria tras ver a aquel despojo humano, por lo que me levanté chulescamente y busqué al único ser móvil que se atrevió a acercarse a mí. En cuanto me sumergí en ese mar de gentes, le localicé, le cogí y nos acercamos (lo suficientemente como para bailar un lento). Entonces él, bastante impresionado pero satisfecho de su situación, agarró mi cintura, yo rodeé su cuello y empezamos a bailar. 
La verdad es que él no es mucho más alto que la mayoría de los chicos. Eso sí, me sacaba casi una cabeza y sus labios están a la altura de mi frente. En un acto de curiosidad, alcé la cabeza y nuestros labios quedaron a unos 3 ó 4 centímetros de distancia.

lunes, 30 de julio de 2012

¡Sal de mi vida!


Aún sigo pensando en ti aunque lo niegue rotundamente. Sé que está mal que lo diga porque de esa manera nunca conseguiré ser libre del todo, y me refiero a abrir mi corazón de nuevo. Pero entraste, sin que tú ni yo lo quisiéramos; y te quedaste ahí encerrado, y no soy capaz de encontrar la llave que abre esta cárcel de amor.
Busqué en mis recuerdos, en mis sentimientos, en mis acciones. Busqué en cada uno de tus gestos; en tu sonrisa, tus ojos, tus manos y tu pelo. Sin embargo, todo fue en vano porque desapareciste de mi vida en un abrir y cerrar de ojos, escapando de mi corazón, dejando una enorme habitación donde todas y cada una de tus palabras flotan libremente llegando al limite del espacio permitido. Escapaste dejándome un vacío interior que no soy capaz de rellenar porque sigo sin encontrar esa llave.
Y nunca la encontraré si no me ayudas a buscarla. Por eso, recurro a ti (de nuevo), a mis pensamientos; de tal manera que puedan ayudarme a contactar contigo por última vez.

domingo, 29 de julio de 2012

I'm back!

¡He vuelto!
Bueno, nunca me he ido; pero aquí en este blog no me metía desde marzo (según mi última entrada).
¿Qué tal durante estos casi 5 meses? Si yo os contara... ¡no acabaría nunca! Sólo decir que vuelvo a la carga y con más textos, así que, no os preocupéis (aunque tampoco veo mucha preocupación xD). Sara vuelve y esta vez vuelve para ti.

martes, 27 de marzo de 2012

Simplemente, te quiero.

Simplemente déjate llevar por el embriagador sonido que nuestras risas emiten.
Simplemente tómame de la cintura y jálame hacia ti.
Simplemente olvídate, por un instante, de la otra.
Simplemente dime que conmigo todos tus males se te pasan.
Simplemente te diré que eres el número uno en mi vida.